Bueno, ya que es viernes y que
tocaba postear por aquí, voy a aprovechar para explicaros un poquito qué ha
estado pasando toda esta semana.
Para los que me seguís en Facebook y en Twitter, sabéis que he estado muy pesado, pero que muy muy pesado
promocionando y posteando la nueva página de facebook, ya que la página que
tenía antes va a desaparecer. Pues bien, el motivo de este “acoso” ha sido muy
sencillo: he firmado con una editorial. ¡Bien! Aunque, vayamos por partes, que
os lo quiero contar todo paso a paso, que sé que sois todos unos cotillas :P
(¿Por qué si no ibais a leer esto?)
A finales de Julio, la editorial Khabox se pone en contacto conmigo.
Me dicen que han leído mi novela,
la que estaba antes disponible en Amazon, y que estarían interesados en
publicarme. A parte de dar saltos de alegría por dentro, les dije que genial,
lo que pasa que como nos íbamos todos de vacaciones, pues hablaríamos a la
vuelta.
Pues eso se quedó ahí, en el aire
(entre medias me ocupé de cotillear un poco la editorial, descubriendo que se
dedicaban a publicar libros LGBT de diferentes géneros como terror o fantasía
entre otros), hasta justo primeros de este mes.
De nuevo, la editorial se puso en
contacto conmigo para retomar la conversación. Y lo mismo, que estaban
interesados en publicarme. Concretamente hablé con el Editor, Fabián, y
estuvimos hablando por mail sobre el contrato, las condiciones y todo ese tipo
de cosas.
Por sintetizar, me ofrecían un
contrato de Edición, de manera que yo no tenía que poner absolutamente nada de
dinero (eso sería co-editar y ya me aclararon que no, que ellos se iban a hacer
cargo de eso). De manera que por ese lado genial, ya que, algunas editoriales
con las que me puse en contacto en su día, me ofrecían contratos de co-edición,
a las cuales les dije que no. Así que una editorial me dijera que ellos se iban
hacer cargo del 100% de los gastos, era un gran punto a su favor.
¿Más cosas? Querían hacerle un
lavado de cara al libro. A parte de cambiar la portada, se iba a revisar el
texto. Ya no solo las faltas de ortografía (que revisándolo ahora, me está
dando vergüenza porque estoy encontrando un montón…) sino partes del texto,
para mejorarlo (a esto también llegué yo haciendo la revisión, al ver que había
párrafos que sí necesitan algo de trabajo extra). De manera que no solo querían
la obra, sino que la querían mejorar. Otro punto más.
Una vez todo este proceso
terminado, el libro saldrá a la venta (así que esperar sentados, ya os iré
avisando, porque podemos estar hablando de mínimo un par de meses). La
editorial se ocupará de sacarlo a la venta en diferentes plataformas, como, a
parte de la suya propia, en Amazon por ejemplo. Dando la opción, aquellas
plataformas que lo permitan, de tener también edición en papel. Esto es otro
punto a su favor, ya que el libro solo estaba disponible en su edición digital.
Con respecto a esto, también está
la opción de hacer presentaciones en diferentes lugares, cosa que me encanta de
todo el mundo editorial. Al menos por el momento que no he hecho ninguna, pero
estar delante de los lectores, hablando, resolviendo dudas y plantearles otras
es algo que me encanta. Aquí va otro punto a su favor.
En definitiva, estuvimos unos
días hablando, resolviendo mis dudas, tras lo cual firmé el contrato. ¡Bien
otra vez!
Y bueno, aunque ya tenía en mente
abrir una página de facebook como escritor, sí que fue algo que me sugirió que
debía hacer. Siendo esa la razón por la que he estado tan pesado estos días…
¡Pues ya sabéis por qué!
Y ahora, así que nadie nos oye…
Todo esto es da un poco de miedito. Y entenderme bien.
Por un lado te alegras, porque
una editorial ha visto “algo” en la novela y quieren publicarte. Además editando
ellos, de manera que confían en la novela. Siendo esto algo muy positivo.
Quiero decirte, a parte de uno mismo, ¿quién iba a apostar por su propia
novela? Y que sea directamente la editorial quien se ponga en contacto contigo…
Bueno, sí que han debido ver potencial… ¿Me explico?
¿Lo malo? Que internet es muy
grande y muy perverso, y siempre lees en algún lugar que alguna editorial se
aprovechó del autor y le sacó casi hasta el corazón. De manera que no puedes
evitar pensar: ¡Dios mío! ¿Estaré vendiendo mi alma y acabarán haciendo papel
higiénico de mi libro? ¡Dios mío! ¡Mi joven y tierno manuscrito! ¡Que lo van a
mancillar!
Creo que soy una persona positiva
y optimista, así que al final pensé: que sea lo que Dios quiera. ¡Voy a pensar
bien! ¿Por qué iba a pasar algo malo? Escribí a varios de los autores que han
publicado en la editorial (por recomendación de la propia editorial) y todos me
han hablado muy bien de ella. Además, seamos positivos, creamos en la buena fe
de las personas. Y tengo que reconocer que, por el momento, va todo muy bien.
Estoy revisando el manuscrito original para, cuando lo tenga, mandarlo y que se
empiecen a hacer correcciones. Ya me han mandado un par de pruebas de la
portada, las cuales me han gustado. En cuanto al resto de número de la saga,
¡no tengo fecha! Me han dicho que tranquilamente nos pongamos con esto y los
otros ya vendrán… No sé, va muy bien todo, ¿verdad?
Así que, cargado de buenos
pensamientos, de buenas intenciones y con muchas ganas, me adentro en este
nuevo camino de las editoriales, las correcciones y las publicaciones.
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